Cómo la política del oficialismo se convierte en un sinónimo de opacidad y desconfianza
En un giro que no sorprende a quienes siguen de cerca la política provincial, la gestión de Juntos Somos Río Negro ha vuelto a dar un claro ejemplo de cómo la impunidad se enreda en la burocracia y el desdén por la seguridad jurídica. Esta vez, el blanco de la crítica es la reciente contratación de la consultora privada Dienst Consulting S.A. para auditar las licencias médicas de los trabajadores estatales. La medida, que comenzó a operar el 1 de septiembre, ha encendido las alarmas y llevado al bloque Vamos con Todos a solicitar informes detallados sobre el proceso.
¿Por qué el Estado de Río Negro opta por delegar en una empresa privada lo que tradicionalmente debería manejarse a través de las juntas médicas públicas? La pregunta no es trivial. José Luis Berros, presidente del Bloque de Legisladores de Vamos con Todos, ha manifestado su rechazo a esta decisión, argumentando que el manejo privado de asuntos que deberían ser de la competencia Estatal atenta contra la seguridad jurídica y la transparencia.
La contratación de Dienst Consulting S.A. ha levantado un velo de sospecha por varias razones. En primer lugar, el proceso de adjudicación ha sido cuestionado por su falta de claridad. No se han publicado los detalles del monto total del contrato, el alcance de las responsabilidades de la empresa, ni el procedimiento administrativo seguido para su adjudicación. ¿Qué motivos técnicos y jurídicos justifican esta externalización? Hasta ahora, la administración de Juntos Somos Río Negro ha ofrecido más sombras que respuestas.
La falta de información sobre la empresa contratada también genera desconfianza. Se solicita que se especifiquen los antecedentes y la documentación respaldatoria de Dienst Consulting S.A., así como la cantidad de agentes públicos afectados y el detalle de los informes proporcionados. Esta falta de transparencia no solo deja en el aire la eficacia del nuevo sistema de auditoría, sino que también expone a los trabajadores a un proceso que, al parecer, no ha sido lo suficientemente claro ni justo.
Además, el sistema actual ha traído consigo una serie de problemas operativos y administrativos que ya han comenzado a afectar a los trabajadores. Desde fallas en la notificación de licencias hasta la imposición de costos indebidos para los traslados de los empleados, el nuevo sistema muestra claros signos de desorganización y mal manejo.
La realidad es que Juntos Somos Río Negro ha establecido un patrón preocupante: un gobierno que actúa con opacidad, que impone soluciones privadas en lugar de fortalecer las instituciones públicas y que asegura impunidad en cada paso. La contratación de Dienst Consulting S.A. es solo otro capítulo en esta historia de desprecio por la gestión transparente y la justicia administrativa.
La pregunta que queda es: ¿Hasta cuándo continuará la administración provincial actuando con esta falta de rendición de cuentas y qué medidas se tomarán para garantizar que los procesos se manejen con la debida transparencia y justicia que los ciudadanos merecen?