La localidad enfrenta una crisis sanitaria con ocho casos confirmados en menos de dos semanas, mientras el hospital carece de recursos básicos y la conducción del Ministerio de Salud estuvo ausente por más de un mes.
El brote de sarampión en Lamarque ya suma ocho casos confirmados en menos de dos semanas. La situación ha puesto de relieve las graves falencias del sistema de salud local, desde la falta de insumos hasta la escasa información proporcionada por el Ministerio de Salud. Ante la crítica situación, el intendente Sergio Hernández y el bloque Vamos con Todos, junto a integrantes del PJ Nuevo Encuentro, han expresado su preocupación, motorizando pedidos de informes y reclamando respuestas urgentes del Estado.
Falta de recursos en el hospital y costos inaccesibles en consultas privadas
Hernández explicó que la situación en Lamarque es «muy crítica», con un hospital local de baja complejidad y una cobertura médica deficiente por parte de la obra social IPROSS. «Las consultas con cobertura tienen un plus de 10 o 12 mil pesos, mientras que una consulta particular puede llegar a costar hasta 20 mil. Así, todos recurren al hospital aunque no encuentren solución», comentó el intendente, en referencia a la escasez de recursos en un hospital que sólo cuenta con 12 camas y depende del nosocomio de Choele Choel como cabecera de la región.
Pedido de informes y falta de respuestas en medio de la crisis epidemiológica
El bloque Vamos con Todos junto a legisladores del PJ Nuevo Encuentro elevaron un pedido de informes para que el Ministerio de Salud explique las medidas tomadas para enfrentar el brote y garantice el derecho universal a la salud. Los legisladores, entre ellos José Luis Berros, Ayelén Spósito y Magdalena Odarda, señalaron que la situación es un incumplimiento a los deberes estatales de vigilancia sanitaria, como exige la Constitución Provincial y la ley K Nº 2216.
“Es alarmante que una enfermedad erradicada en los años setenta vuelva a surgir en el país. Queremos saber qué acciones concretas ha tomado el Ministerio de Salud para controlar el brote en Lamarque”, enfatizó Berros.
Entre las cuestiones requeridas en el pedido de informes, los legisladores solicitaron detalles sobre la asignación de recursos, la disponibilidad de camas, la cantidad de ambulancias, la coordinación con escuelas sobre vacunación y el presupuesto asignado a alertas epidemiológicas. Además, se plantearon interrogantes sobre los programas provinciales para facilitar el acceso a las vacunas.
Un Ministerio de Salud sin rumbo durante más de un mes
El brote en Lamarque estalla en un momento de incertidumbre institucional en el Ministerio de Salud, ya que la renuncia de la anterior ministra el 4 de septiembre dejó al organismo sin liderazgo hasta el 14 de octubre, cuando se anunció oficialmente que Demetrio Thalasselis asumiría al frente de la cartera. Esta situación mantuvo al sistema de salud provincial en una especie de limbo, sin una conducción clara y sin estrategias definidas, según señalan los legisladores.
La combinación de falta de insumos en los hospitales, costos de salud privados inaccesibles, y una crisis en la dirección del Ministerio, conforman un escenario en el que los ciudadanos rionegrinos, y especialmente los habitantes de Lamarque, quedan en una situación de vulnerabilidad sanitaria.