En una sesión clave, la Cámara de Diputados dio luz verde al veto presidencial de Javier Milei, bloqueando el aumento a las jubilaciones. La votación arrojó 153 votos afirmativos, 87 negativos y 8 abstenciones, reflejando la profunda división política sobre la reforma jubilatoria.
La decisión se produjo en medio de intensas protestas de jubilados y sindicatos, cuyas manifestaciones se hicieron sentir incluso dentro del Congreso Nacional. Este veto confirma el posicionamiento de Milei y sus aliados contra la propuesta de incrementar los haberes jubilatorios.
Apoyo clave de la UCR
El presidente contó con el respaldo de varios legisladores de la Unión Cívica Radical (UCR), entre ellos Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat, Federico Tournier y Pablo Cervi, quienes fueron fundamentales para alcanzar los dos tercios necesarios para aprobar el veto.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también jugó un rol crucial, negociando con Mariano Campero y otros diputados de la bancada que lidera Rodrigo De Loredo para consolidar un bloque que impidiera el avance de la reforma jubilatoria impulsada por el peronismo, el pichettismo, la izquierda y parte de la UCR.
Oposición y futuro de la reforma
Con el veto aprobado, la oposición ya está planificando sus próximos movimientos. Algunos legisladores han propuesto exigir una votación nominal para que los diputados que apoyaron el veto queden expuestos públicamente. Otra opción que barajan es llevar la discusión a la comisión de Presupuesto para reabrir el debate sobre la reforma.
Para que esta alternativa prospere, solo se requiere una mayoría simple de 129 diputados, un número que la oposición cree poder alcanzar sin dificultades en futuras sesiones.