Caputo y Milei pulverizaron jubilaciones y gasto social en abril para lograr superávit fiscal

Bajo el eufemismo de lograr el “ancla fiscal”, el gobierno festeja que sigue ajustando a jubilados y trabajadores para beneficiar a la casta empresaria. El Ministerio de Economía informó que Estado registró un superávit financiero por cuarto mes consecutivo. La recaudación tributaria creció por detrás de la inflación, pero los gastos se redujeron aún más.

El Ministerio de Economía publicó este jueves el resultado fiscal del mes de abril, anunciando un superávit fiscal tanto primario (antes del pago de intereses de deuda) como financiero (incluyendo el pago de intereses). El ministro Luis Caputo lo festejó por redes remarcando que el superávit financiero se alcanzó por cuarto mes consecutivo, es decir, en los cuatro primeros meses del año.

Pero lejos de ser el resultado de un proceso virtuoso, estos datos son causados por un fuerte ajuste sobre las partidas destinadas a jubilaciones y pensiones, prestaciones sociales y obra pública y a una crisis cada vez más profunda producto de la recesión y la caída de los ingresos.

“Durante abril, el Sector Público Nacional (SPN) registró un superávit financiero de $17.409 millones, producto de un superávit primario de $264.952 millones y de intereses de la deuda pública neto de pagos intra-sector público, que alcanzaron los $247.543 millones“, informó el Ministerio de Economía.

Por el lado del Gasto Primario, se destinaron $6,5 billones, con un incremento nominal de 197% en un año, lo que frente a una inflación de 289,4% en el mismo período, implica una caída real de algo más del 24%. Es decir, se recortó un cuarto del poder de compra de todas las partidas excepto deuda.

Además, el comunicado oficial destacó que desde el año 2008 no se registraba un excedente financiero por cuatro meses consecutivos. Lo que festejan como un logro, es una verdadera catástrofe que bajo la apariencia de “equilibrar las cuentas fiscales” lejos está de beneficiar a las familias trabajadoras. “De esta forma se continúa consolidando el ancla fiscal del programa de gobierno”, sentenció el comunicado de Economía, como si detrás del ajuste de la motosierra y al licuadora hubiese un verdadero plan que no sea el pago de la deuda y los negocios de las grandes patronales.

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Recaudación debilitada por la caída económica

Los ingresos totales del SPN en el mes alcanzaron los $6,8 millones, con una suba de 263,9% interanual, lo que implicó una caída real del 6,5% (respecto a la inflación). Dentro de los ingresos, la recaudación tributaria creció 254,6% interanual, con una suba importante en los ingresos de los derechos de exportación por arriba de la inflación (418,2%), del impuesto PAIS y de las rentas de propiedad del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses (448,8%).

El mayor retroceso de los impuestos es de aquellos ligados a la actividad interna debido a la contracción del consumo y económica, como IVA neto de reintegros, débitos y créditos y en los aportes y contribuciones a la seguridad social.

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Licuadora y motosierra al Gasto Público: todo debajo de la inflación

Por el lado del Gasto, los gastos primarios del Sector Público Nacional (sin contar el pago de intereses de deuda) alcanzaron en el mes de abril los $6.527.253 millones, con una suba interanual de 197%, lo que implica una caída real del 24% en un año.

Dentro del Gasto, la mayor partida es la destinada a prestaciones de la Seguridad Social (jubilaciones, pensiones, asignaciones familiares), que en abril ascendió a $2.292.172 millones, sin embargo, esto implica un incremento de 188,5% interanual, lo que significa un recorte de 26% en un año.

La explicación de este ajuste se detalla en el comunicado oficial como un valor en sí por el robo del cambio en la fórmula de movilidad por Decreto: “Esta dinámica se explica por el impacto de la fórmula de movilidad aprobada por la Ley N° 27.609 y el DNU 274/24, que adecuó la mencionada fórmula para que los aumentos jubilatorios acompañen la evolución de la inflación y otorgó una compensación adicional de 12,5% para todos los pasivos”. Insólita aclaración, cuando en el mismo día Anses informó que la llamada “compensación” del 12,5% no es tal sino que se descontará de la movilidad previsional de junio.

Por otra parte, las remuneraciones alcanzaron los $894.498 millones (+219,9% i.a.) “producto de los incrementos otorgados en el marco de las políticas salariales acordadas”. Otra confesión de partes, pues este incremento por detrás de la inflación significa un recorte del 18% interanual.

Las transferencias corrientes al sector público también mostraron una fuerte caìda, destacándose las asistencias financieras a universidades (-27,4%), que fue rechazada por la comunidad universitaria y la sociedad en general con una enorme marcha el pasado 23 de abril. Y los subsidios económicos con un retroceso del orden del 12 % real.

“Los subsidios económicos crecieron en +$667.785 millones (+234,5% i.a.), donde los energéticos se incrementaron +$549.825 millones (+239,3% i.a.), mientras que los destinados al transporte en lo hicieron en +$111.401 millones (223,9% i.a.)”, expresó el comunicado de Economía.

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